Por Santiago López Navia
Pásmase Tediato de la rara sabiduría que derrochan
algunos audaces estultos que se permiten opinar sin despeinarse sobre todo lo
divino y humano
¿Habéis visto nada más tenebroso que un tonto? (José Ángel Valente)
Líbranos, Dios, de tanto inteligente de verbo tan soberbio y atorrante que pontifica a voces, arrogante, con rebuzno necio y prepotente.
Líbranos, Dios, del fatuo efervescente con ínfulas de Júpiter tonante, que toma la lección siendo ignorante y confunde sustancia y accidente.
Con tanto sabio suelto me barrunto que habrá que resignarse ante el encanto de tanta luz y tanto lucimiento
y no olvidar la chicha del asunto: que se puede ser tonto siendo tanto y sin talante no renta el talento.