Del Infierno al Paraíso, una moderna interpretación del viaje de Dante (y 2)
22 noviembre, 2023
El peligro de los memes
25 diciembre, 2023

[Texto leído por Teresa Gómez (1) a modo de presentación en la conferencia impartida por Juan Varela-Portas para el Ateneo de Granada el pasado 30 de noviembre de 2023]

Dante, poeta del amor es un libro fruto del proyecto Madrid cittá/ ciudad dantesca con el que se celebró en 2021 el 7º centenario de la muerte de Dante Alighieri y dado que emana de intervenciones orales con clara intención divulgativa, su tono es sencillo y accesible sin que esto merme en lo más mínimo el rigor académico.

Juan Varela-Portas nos presenta a Dante como el poeta que articula toda su producción en torno al amor, base de la felicidad tanto personal como social. Y la reflexión sobre el amor, no sólo el amor sentimental sino sobre los distintos tipos y concepciones de amor (individual, colectivo, político…), un amor que, guiado por la razón, conduzca al ser humano a la libertad, más allá de sus propias limitaciones, conduce a la reflexión sobre la belleza y la reflexión sobre la imaginación (considerada la parte del cuerpo que lo vincula a la mente) capaz de representar lo inimaginable, o la reflexión sobre la codicia y su contrapunto, la caridad, el sentido de la justicia frente al extravío, etc.

Juan Varela nos hace ver la enorme frustración que supone para el poeta, que concibe el amor como la gran potencia capaz de hacernos alcanzar la felicidad, mirar a su alrededor y encontrar un mundo sin amor, cuando mira encuentra que el desamor se ha impuesto en el mundo (violencia, injusticias, crisis políticas… en definitiva, la falta de contacto con el bien y la verdad, la falta de belleza y de amor que nos conduce al odio (y no, aunque pueda parecerlo, no estamos hablando ahora de lo que nos rodea hoy día, estamos hablando de lo que rodeaba a Dante hace 700 años).

Dante Alighieri, inspirado e impulsado por el amor, afronta La divina comedia con una misión: sembrar la esperanza en el mundo, devolverle la esperanza al ser humano, conducirlos a su realización como individuos y a la perfección política de su sociedad. Sólo a través del conocimiento puede llegar el ser humano, un ser histórico y político, a la felicidad.

Sumido en una profunda crisis, la selva oscura, comienza a emerger a través de la literatura, a través de esta obra impresionante que pone a la ética, la metafísica, la política, filosofía, la psicología, la teología e incluso a la ciencia, al servicio de la literatura con la intención de dar una  explicación total del universo.

Como tantas otras veces a lo largo de la historia, la poesía representará el estímulo para superar la depresión, para salir de la selva oscura.

Será Beatriz (la que conduce a la felicidad) quien le guie en su ascensión al paraíso. A través de la belleza de los ojos de Beatriz que despiertan cada vez más el amor de Dante, es como él va ascendiendo de cielo en cielo, “Parece una cosa que viniese/ del cielo a tierra por mostrar milagro”. 

Pero tenemos que detenernos aquí para considerar que Beatriz, uno de los grandes mitos femeninos, resulta ser una mujer creada por un hombre, una proyección masculina. Y no sólo esto, sino que quizá ni siquiera sea una mujer sino una alegoría ¿de qué? ¿qué es tan bello y tan potente para sacarlo de la selva oscura?  

Dante Alighieri escribió La divina comedia hace siete siglos, con una concepción del mundo radicalmente distinta a la nuestra, para transmitir esperanza a un ser humano que desorientado despertaba a un capitalismo incipiente que hacía tambalear los cimientos de la comunidad. Hoy ese mismo ser humano, más desorientado aún, si cabe, frente a un capitalismo salvaje y agotado sigue necesitando despertar la esperanza. Dante establece la posibilidad de una utopía política que expulse del mundo la cupidigia, la codicia, el capitalismo, (el deseo fetichista insaciable, el deseo desmedido de acumulación que tan bien ilustrado estamos viendo estos días en las colas del black friday). Nos ofrece la seguridad de que, a pesar de todo el ser humano por su propia naturaleza, tiende al bien y es capaz de alcanzar la felicidad personal y política.

Por eso La divina comedia nos sigue interpelando, por eso es necesario seguir leyéndola y por eso recibimos con entusiasmo este libro exquisito que nos desvela las claves de este poeta universal, complejo y profundo, que ha espoleado la imaginación de artistas a través de los tiempos y que nos sigue fascinando siete siglos después. Y agradecemos la penetrante mirada de Juan Varela-Corpas fundamentada en el inconsciente ideológico, enfocada desde un radical historicismo (no por nada estamos ante un alumno brillante del añorado maestro Juan Carlos Rodríguez)  que nos sitúa a Dante en el inicio del sistema de producción capitalista y sus consecuencias económicas, sociales, políticas… 

(1)Teresa Gómez (Granada, 1960) es poeta y licenciada en Filología Hispánica y Psicopedagogía. Desde los años 80 se publican sus poemas en diversas antologías y plaquettes, pero no encontramos ningún poemario completo hasta 2018 con La espalda de la violinista y, más tarde, Plaza de Abastos (2023, aunque este fuera su primer libro, presentado ya en 1986, pero no publicado hasta ahora), ambos en la colección Vandalia de la Fundación José Manuel Lara.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *