El autor: José Miguel Junco Ezquerra (Las Palmas, 1951) es licenciado en Historia y Filología Inglesa. Actualmente imparte clases de inglés en el centro de Adultos de Las Palmas.
En 1974 participó en el primer congreso de poesía canaria, celebrado en La Laguna, y desde entonces ha publicado sus poemas en diversos medios de comunicación y revistas especializadas, y participado en recitales poéticos tanto individuales como colectivos en las distintas islas del archipiélago canario.
Entre sus obras colectivas destacan Elegías últimas a Miguel Hernández (2010), Madrid con los poetas canarios (2010), Muestra del siglo XXI. Poesía actual (2005), Acantilado y silencio (2004), Poesía canaria en viva voz (2002), Los transeúntes de los ecos (2001) y Primer Congreso de Poesía Canaria (1974).
Hasta la fecha ha publicado los libros de poemas: Países extranjeros (su primer poemario en Ediciones de La Discreta en 2004), Los días contados (2002), El hombre de salitre y otros poemas (2000), Cambios de ritmo (1998), Hacer las paces (mención especial del jurado del premio Tomás Morales, 1994) y Telegrama a una estrella (1989). La poesía de Pepe Junco se rebela todo el tiempo ante la estulticia y lo falaz, ante una realidad que pasa de largo por nosotros si no contribuimos a dotarla de sensaciones que nos mantenga vivos y atentos al canto de los pájaros o a la mirada del amor. El poeta no se aleja de esa cotidianeidad: la reinventa y se adentra en ella tratando todo el tiempo de encontrarle lo que sólo se asoma para los ojos con capacidad de encontrar los tesoros más ocultos. Incluso da lo mismo que no los vea. Si hay que escribirlos para que aparezcan, se escriben, y si hay que volverlos poesía, se vuelven poesía necesaria para poder saltar los obstáculos de lo prosaico y del lenguaje agresivo y trillado que sale de las televisiones y de las juntas de accionistas. Santiago Gil
En 1974 participó en el primer congreso de poesía canaria, celebrado en La Laguna, y desde entonces ha publicado sus poemas en diversos medios de comunicación y revistas especializadas, y participado en recitales poéticos tanto individuales como colectivos en las distintas islas del archipiélago canario.
Entre sus obras colectivas destacan Elegías últimas a Miguel Hernández (2010), Madrid con los poetas canarios (2010), Muestra del siglo XXI. Poesía actual (2005), Acantilado y silencio (2004), Poesía canaria en viva voz (2002), Los transeúntes de los ecos (2001) y Primer Congreso de Poesía Canaria (1974).
Hasta la fecha ha publicado los libros de poemas: Países extranjeros (su primer poemario en Ediciones de La Discreta en 2004), Los días contados (2002), El hombre de salitre y otros poemas (2000), Cambios de ritmo (1998), Hacer las paces (mención especial del jurado del premio Tomás Morales, 1994) y Telegrama a una estrella (1989). La poesía de Pepe Junco se rebela todo el tiempo ante la estulticia y lo falaz, ante una realidad que pasa de largo por nosotros si no contribuimos a dotarla de sensaciones que nos mantenga vivos y atentos al canto de los pájaros o a la mirada del amor. El poeta no se aleja de esa cotidianeidad: la reinventa y se adentra en ella tratando todo el tiempo de encontrarle lo que sólo se asoma para los ojos con capacidad de encontrar los tesoros más ocultos. Incluso da lo mismo que no los vea. Si hay que escribirlos para que aparezcan, se escriben, y si hay que volverlos poesía, se vuelven poesía necesaria para poder saltar los obstáculos de lo prosaico y del lenguaje agresivo y trillado que sale de las televisiones y de las juntas de accionistas. Santiago Gil