Por Luis Junco

Interstellar: The Search for Extraterrestrial Life and Our Future in the Stars (agosto 2023), es el nuevo libro del autor de Extraterrestre, de quien ya hemos dado cuenta en este blog:

https://www.ladiscreta.com/2022/11/15/avi-loeb-el-extraterrestre-1/

https://www.ladiscreta.com/2023/06/21/el-proyecto-galileo-una-magnifica-aventura/

En esta ocasión, Abraham Loeb explica los objetivos del Proyecto Galileo, defiende sus posiciones contra los detractores y aboga -como ya hizo en su libro anterior- por la necesidad de modificar la mentalidad actual de la humanidad, cortoplacista y egocéntrica, hacia un futuro que tiene que ir mucho más allá de nuestra estrella. 

Ya dije en una ocasión que a pesar de que una buena parte de la comunidad científica más conservadora lo critica, a mí sus argumentos me parecen muy razonables. Como ejemplo, y porque me parece que con ello puedo alentar a la lectura de esta nueva publicación, transcribo algunos párrafos. Se refieren precisamente al lastre ideológico que en tantas ocasiones ha aparecido en la historia de la humanidad al enfrentarse a lo nuevo y a lo desconocido.

Es una historia bastante conocida el número de siglos que llevó a la humanidad a aceptar la realidad del heliocentrismo. Un arco de fechas que va desde la publicación de Copérnico cuando ya estaba en su lecho de muerte, pasando por el arresto domiciliario de Galileo por sus experimentos, hasta los albores del siglo XX, cuando Edwin Hubble demostró sin lugar a dudas la insignificancia de nuestra Tierra, nuestra estrella y la insignificancia del sistema solar en su conjunto ante el nuevo escenario que era el cosmos. De forma parecida, llevó décadas el que la teoría general de la relatividad de Eisntein fuera aceptada. Publicada en 1915, y confirmada por Arthur Eddington en 1919, durante años siguió siendo materia de miedos y rumorología. En 1931, una publicación titulada “101 Autores en contra de Einstein” recogía las críticas de significados académicos de la época. Una década anterior, el propio Einstein había escrito una carta a un amigo en estos términos: “El mundo me parece una extraña casa de locos. Con cierto pasmo, soy testigo de cómo cocheros y camareros de bar debaten a diario si la teoría de la relatividad es correcta. La conclusión parece depender de la afiliación al partido político correspondiente”.

Supone cierto consuelo el hecho de que mientras la aceptación del heliocentrismo llevó siglos, la de la relatividad general fue solo unas décadas. Y su aplicación aún más rápida. El trayecto de su coche con la ayuda de la aplicación del GPS desde su origen hasta el destino deseado depende de los cálculos hechos teniendo en cuenta la relatividad general de Einstein. 

Pero el comentario de Einstein sirve igualmente si hoy sustituimos la teoría de la relatividad por el cambio climático. ¿Qué pensar si no sobre los debates políticos en esta casa de locos de nuestra civilización actual sobre la realidad del cambio climático, a pesar de la abrumadora y creciente evidencia?