Igual que en los bazares orientales se puede encontrar todo tipo de objetos, en este libro podemos hallar los textos más diversos. Hay pequeños ensayos, cuentos, haikus, argumentos de relatos, fragmentos de historias más largas, entradas de diario, notas antropológicas, históricas, hay autobiografía, recuerdos, crítica, opinión, aforismos… Parece que el título está justificado.
En estas notas y fragmentos vuelven una y otra vez los temas más queridos del autor, que por otra parte son los temas de los que se suele ocupar la literatura: el paso del tiempo, el sentido de la vida, el amor, la infancia, la memoria, la inagotable novedad del mundo, los libros, el cine…
Muchos de estos textos están en la línea de las obras anteriores de Emilio Gavilanes. En este libro conviven todos sus mundos.
Bazar es un libro desordenado y múltiple. Pero quizá todos los fragmentos que lo componen constituyen una especie de mosaico cuyas teselas trazan la imagen del autor. El autor Emilio Gavilanes (Madrid, 1959) realizó estudios de Geológicas y de Físicas y se licenció en Filología Románica. Actualmente es lexicógrafo. Ha publicado las novelas La primera aventura (Seix Barral, 1991), El bosque perdido (Seix Barral, 2001), Una gota de ámbar (La Discreta, 2007) y Breve enciclopedia de la infancia (Edhasa/Castalia, 2014); las colecciones de cuentos La tabla del dos (Premio NH 2004 al mejor libro de relatos inédito), El río (La Discreta, 2005, finalista del III Premio Setenil de relatos), El reino de la nada (Menoscuarto, 2011), Historia secreta del mundo (La Discreta, 2015, premio Setenil al mejor libro de relatos publicado en 2015) y Autorretrato (Punto de Vista, 2015); y las colecciones de haikus Salta del agua un pez (La Veleta, 2011) y El gran silencio (La Veleta, 2013). También ha preparado la edición de la obra del escritor gallego de la generación del 98 Camilo Bargiela Luciérnagas (Renacimiento, 2009).
En estas notas y fragmentos vuelven una y otra vez los temas más queridos del autor, que por otra parte son los temas de los que se suele ocupar la literatura: el paso del tiempo, el sentido de la vida, el amor, la infancia, la memoria, la inagotable novedad del mundo, los libros, el cine…
Muchos de estos textos están en la línea de las obras anteriores de Emilio Gavilanes. En este libro conviven todos sus mundos.
Bazar es un libro desordenado y múltiple. Pero quizá todos los fragmentos que lo componen constituyen una especie de mosaico cuyas teselas trazan la imagen del autor. El autor Emilio Gavilanes (Madrid, 1959) realizó estudios de Geológicas y de Físicas y se licenció en Filología Románica. Actualmente es lexicógrafo. Ha publicado las novelas La primera aventura (Seix Barral, 1991), El bosque perdido (Seix Barral, 2001), Una gota de ámbar (La Discreta, 2007) y Breve enciclopedia de la infancia (Edhasa/Castalia, 2014); las colecciones de cuentos La tabla del dos (Premio NH 2004 al mejor libro de relatos inédito), El río (La Discreta, 2005, finalista del III Premio Setenil de relatos), El reino de la nada (Menoscuarto, 2011), Historia secreta del mundo (La Discreta, 2015, premio Setenil al mejor libro de relatos publicado en 2015) y Autorretrato (Punto de Vista, 2015); y las colecciones de haikus Salta del agua un pez (La Veleta, 2011) y El gran silencio (La Veleta, 2013). También ha preparado la edición de la obra del escritor gallego de la generación del 98 Camilo Bargiela Luciérnagas (Renacimiento, 2009).
Nota de prensa y reseñas
– Nota de prensa del libro Bazar
– Nota de prensa del libro Bazar
– Reseña de Bazar en el blog Devaneos
– Reseña de Bazar en el blog Nueva Tribuna
– Reseña de Bazar en el blog Modelnos
– Reseña de Bazar en el blog Libros de Cíbola
– Reseña de Bazar en el blog Periodistas en español
– Reseña de Bazar en el blog Ciclotimias
– Reseña de Bazar en el Revistas uva
Magnífico libro. He pasado unos días muy buenos en su compañía, leyéndolo poco a poco, para que no se me acabara. Está maravillosamente escrito. Quien lo ha escrito es alguien muy inteligente, si bien la inteligencia está moderada o incluso disimulada por el sentimiento.
Es estupendo. Lo recomendaré.
Me está gustando tanto como el otro [Historia secreta del mundo]. Es otra hermosura. Me ha parecido siempre iluminador, a veces deslumbrante.
Nueva demostración de madurez personal y literaria. Cómo me gusta.
Bazar me ha parecido una obra magnífica y profunda, y uno de los mejores libros de textos breves que he tenido la oportunidad de leer recientemente (ya había leído, en la misma editorial, Historia secreta del mundo y Río, dos títulos fascinantes). Es un libro magnífico e imprescindible para los aficionados a este tipo de escritura híbrida e intimista.
Bazar es hijo de su tiempo. De naturaleza fragmentaria, está articulado en textos breves o muy breves de libre creación, evitando así la servidumbre propia de la historia única y favoreciendo un caleidoscopio temático. Es una suerte de mirador desde el que observar el mundo exterior y, de paso, analizar el yo más íntimo. Estoy convencido de que si Dickens, Dostoievski o Stevenson vivieran hoy, nos ofrecerían obras no muy diferentes a esta.
El autor busca un sentido y lo encuentra en la escritura, con la posibilidad que esta brinda de organizar una vida con las hechuras de un relato, una narración que le permitiría a uno verse desde el otro lado, su vida como algo explicable. Como en Historia secreta del mundo lo ponderable aquí no son las grandes gestas ni hazañas ni batallas ni fechas que cambiaron el rumbo de la historia, sino las notas a pie de página, el día a día del común de los mortales. Me trae a las mientes otras lecturas como El libro del desasosiego de Pessoa, Pensar de Vergilío Ferreira o El murmullo del mundo de Tomás Sánchez Santiago, por citar algunas.
Pocos espectáculos hay tan bellos y tan simbólicos como la lectura de las palabras ordenadas sobre la verdad limpia de un libro a la manera de Emilio Gavilanes y su escritura perfecta. Porque Bazar es un bazar de textos escritos por uno de los mejores artistas literarios en español que yo haya leído jamás. Yo no podré olvidar esta lectura, no me hará falta recordar que Bazar fue uno de los libros que leí cuando la pandemia del coronavirus en 2020.
Tengo un serio problema con Bazar.No doy abasto a marcar todos los pasajes que me gustan. Es una continuidad climática, una condensación, una sobredosis. He de leerlo despacio porque, de otro modo, me da la sensación de estar desperdiciándolo. Solo tuve esa sensación, que yo recuerde, con uno de mis libros favoritos, también un totum revolutum de apuntes y reflexiones: las Prosas apátridas, de Julio Ramón Ribeyro. Bazar es una cámara de maravillas, una cueva de tesoros. Emilio Gavilanes, ese maestro de la concisión, condensa en cada página ideas que podrían alumbrar libros enteros. Es iluminador, estimulante y profundamente inteligente.
Bazar nos muestra una vez más la enorme capacidad del autor para maravillarnos con sus revelaciones sobre el paso del tiempo, el sentido de la vida, la memoria, los sueños, la bondad o, también, la perversidad
Un libro único que abre una forma de narrar. Es como un collar en el que se van engarzando gemas (pensamientos, micro relatos, digresiones, anécdotas personales, vivencias de la infancia, fogonazos históricos...) en un orden pretendidamente aleatorio. Pero el conjunto resultante tiene su propia música. Gavilanes es uno de los grandes del relato breve en España y sin embargo se lo conoce mucho menos de lo que debería. Bazar es un nuevo hito en una gran carrera.
Profundidad, perspicacia, intuición, nostalgia, trascendencia, mundo interior, empatía, sensibilidad, introspección, inteligencia, evocación, una elaborada y vasta cultura, sabiduría, magisterio, talento, brillantez, asombro, conmoción y una enorme bondad. Este es el bazar que yo he encontrado en Bazar.
No tiene capítulos, son pequeños fragmentos: pensamientos, opiniones, microrrelatos, haikus, recuerdos. Pero cada uno es una joya. Y el conjunto te da impresión de haber descubierto un territorio inexplorado.
Si este libro lo llega a publicar Acantilado o un sello así, todos los suplementos literarios lo recomendarían como locos. Lo ha publicado La Discreta y hay que aplaudir su excelente criterio y pedir a todos que lean esta maravilla fragmentaria, llena de poesía y profundidad.
Terminar la semana recibiendo lo último de Emilio Gavilanes es acabar muy arriba. Su Historia secreta del mundo nos enamoró y no nos hemos cansado nunca de recomendarlo. Así que, si nos buscáis este fin de semana, que sepáis que estaremos sumergidos y disfrutando en su Bazar.
Transmitir con sobriedad, naturalidad y elegancia la reflexión filosófica sobre temas eternos, el sentimiento preciso recordado, la sensación sentida por el autor en momentos concretos de su historia a la misma vez que provocar el vuelo de la emoción del lector es el logro de esta obra que, no exenta de humor en algunas ocasiones, nos acerca a la mejor literatura
El libro es una delicia, se abra por donde se abra. Es un libro al que uno tiene que volver una y otra vez necesariamente. A mí me va a acompañar por mucho tiempo y además me voy a hartar de regalarlo.
Una desordenada y caótica armonía que nos sorprende en cada rincón de sus páginas.